Para poder hablar del sillón y su aparición, tendremos que hablar de historia. La invención y fabricación son reproducciones de lo social, no podemos separarlos.
Atrás del sillón que está adornando tu comedor o estudio, no hay un simple mueble o una mercancía de libre acceso para todos, más bien todo lo contrario: estamos viendo el resultado de grandes cambios en la organización social. En este artículo te contamos de donde viene el sillón y porque se vincula a los más importantes periodos históricos.
4000 años de historia
A diferencia de otros grandes inventos de la historia, en el caso del sillón no tenemos un nombre al cual atribuirle la creación, solo dos posibles ubicaciones geográficas.
Se cree que el origen del sillón tuvo lugar hace miles de años A.C., dentro de una de las civilizaciones más famosas: la egipcia.
Para ellos el sillón era una pieza fundamental, distintiva para quienes fueron los primeros en disfrutar su comodidad. Representaba poder, estatus.
Debido a su creencia de descender de los dioses, los faraones necesitaban estar “sobre la tierra” elevados de la misma. El sillón les permitía que sus pies no tocaran el suelo, acercándolos más a los dioses.
Aproximación al uso actual
Posteriormente, los emperadores romanos también hicieron uso del sillón como símbolo de distinción y superioridad ante sus semejantes. Las mujeres, niños y otros hombres no tenían permitido usar el sillón.
Sin embargo, los romanos le dieron al sillón un uso menos formal y más festivo, llevándolo al comedor para disfrutar cómodamente de los banquetes.
Durante la Edad Media, el sillón seguía materializando la riqueza, siendo un objeto de acceso exclusivo para la nobleza.
No será hasta el S. XVIII, con el estallido de la Revolución Industrial, que su producción se automatizará permitiendo, además, gracias a la disminución del costo, que sea accesible para las clases medias y trabajadoras.
Como pueden ver, el sillón no es solamente un objeto fabricado por un carpintero y/o tapicero. Desde que se creó, el sillón estuvo vinculado al entorno social, y hacia donde avanzaba nuestra historia, el sillón se fue revistiendo de la realidad económica y social del momento. Por esa razón, no podemos solo hablar de donde y cuando se inventó. Es importante saber que utilidad representaba.